martes, 20 de marzo de 2012

Dime que me quieres esta noche, por si no hay un mañana: Capitulo 4: Demasiado simple.

Desde aquel día, dejé de pensar en Hugo y me prometí que si lo volvía a ver, quedaría todo como si fuesemos amigos. Ya está. Punto y final.
Lo que no sabía era que volvería a encontrarmelo antes de lo esperaba.
Pero aún así, hay algo que tengo que contar que pasó antes. Paula me llamó un día, llorando, con la voz agitada. Había discutido con Matías, aquel cabrón del que ella estaba terriblemente enamorada. La había dejado, según me contó, porque quería volver conmigo.
Aquel gilipollas quería que nosotras nos peleasemos por el, pero estaba muy equivocado, porque mi amiga tambien se habia dado cuenta del engaño, y no pensabamos caer de nuevo en él. Nunca. Jamás ibamos a pelearnos por un chico, y muchisimo menos, por aquel.
Y por otra parte estaba Jake, que de repente se volvió frío conmigo.
-¿Que te pasa? - le pregunté
-Que tu ya no me quieres. Ultimamente estas rara conmigo, y yo asi no puedo vivir. Te quiero, pero no voy a dejar que juegues conmigo. Adios.

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